
Luxación de rótula en perros: síntomas, tratamiento y calidad de vida
Si su perro, cuando va caminando, de repente da un pequeño salto y mantiene una de las extremidades elevada durante algunos pasos, puede que tenga una luxación en la rótula. Cuando esta articulación sufre una lesión, la funcionalidad de la extremidad del perro se ve afectada visiblemente. Esta dolencia puede causar molestias, cojera intermitente o persistente y, si no se trata adecuadamente, puede derivar en problemas más graves a largo plazo, como la artritis.
La luxación de rótula es uno de los problemas ortopédicos más comunes entre perros, y aunque tradicionalmente se ha asociado con razas pequeñas, cada vez es más común su diagnóstico en perros de razas grandes.
En este artículo, desde SURvet, explicamos, qué es, las causas de la afección, cómo afecta una luxación de rótula a los perros, cómo se puede detectar y se puede tratar. Además, aportaremos una serie de consejos que ayuden a prevenir esta y otras dolencias y que facilitarán que tu mascota lleve una vida sana y de calidad.
Contenidos
- 1 ¿Qué es la luxación de rodilla en perros? ¿Por qué se luxa la rótula?
- 2 ¿Cuáles son los síntomas de luxación de rodilla en perros?
- 3 Diagnóstico. Clasificación por grados de la luxación
- 4 Tratamiento de la luxación de rodilla en perros
- 5 ¿Es dolorosa la luxación de rodilla en perros?
- 6 Tiempo de recuperación y seguimiento postoperatorio
- 7 ¿Qué consecuencias tiene para el perro? Pronóstico y calidad de vida
- 8 ¿Qué perros son más propensos a sufrir la lesión?
- 9 Prevención y cuidados
- 10 La importancia del control del peso
¿Qué es la luxación de rodilla en perros? ¿Por qué se luxa la rótula?
La luxación patelar de rodilla en perros, también conocida como luxación de rótula, es una afección en la que la rótula se desplaza de su posición normal.
¡Pero vamos por partes! ¿Qué es la rótula?
La rótula es un pequeño hueso sesamoideo -hueso incrustado en un tendón- que se encuentra en la parte frontal de la articulación de la rodilla, localizado en el tendón del cuádriceps. Para que el movimiento de la extremidad de la mascota sea el óptimo, debe estar en su posición correcta y no sufrir alteración alguna.
La función principal de la rótula es actuar como una polea que facilita el movimiento de extensión de la pierna. En perros con luxación, la rótula se desliza fuera de su surco, generalmente hacia el interior –luxación medial– o, menos frecuentemente, hacia el exterior –luxación lateral-.
Las causas de la luxación y, posible, rotura pueden ser congénitas o adquiridas:
- Congénita -hereditaria-. Muchos perros nacen con una predisposición anatómica que favorece la luxación. A medida que el cachorro crece, los huesos y músculos de las patas traseras pueden desarrollarse de forma ligeramente desalineada. Esto provoca que el potente músculo cuádriceps del muslo ejerza una tracción anormal que desplaza la rótula fuera del surco femoral donde debería encajar. En muchos casos, este surco no se forma adecuadamente, es demasiado superficial y permite que la rótula se desplace con facilidad.
- Adquirida. En otros casos, la luxación de rótula se debe a una lesión traumática, causada por un fuerte golpe, aunque esta causa es menos común.
¿Cuáles son los síntomas de luxación de rodilla en perros?
Estos son los síntomas más comunes, aunque los signos pueden variar según la gravedad del caso:
- Mantener levantada la pata afectada durante unos pasos mientras camina.
- Los perros que presentan luxación rotuliana en ambas rodillas suelen caminar con rigidez y mostrar dificultad al moverse.
- Cojera intermitente o constante en una o ambas patas traseras.
- Pequeños brincos al caminar, durante los cuales el perro levanta brevemente la pata afectada.
- Dolor o sensibilidad en la rodilla al manipularla.
- Cambios en el comportamiento como irritabilidad, agresividad o retraimiento reflejan que la mascota está sufriendo dolor.
- Lamer, morder o mordisquear constantemente la zona de la rodilla es otro signo de malestar intenso.
- En los casos más graves, puede haber dificultad para apoyar la pata e incluso una deformidad visible.
Diagnóstico. Clasificación por grados de la luxación
El diagnóstico de la luxación de rótula se basa en la historia clínica del perro, la exploración ortopédica por parte del profesional veterinario y el apoyo de estudios radiográficos, para evaluar el grado de luxación y posibles daños asociados en los huesos o cartílagos.
La clasificación por grados de esta patología en perros, ayuda a determinar la gravedad del problema y el tratamiento más adecuado:
- Grado I: la rótula puede salirse manualmente, pero vuelve a su sitio por sí sola.
- Grado II: la rótula se luxa espontáneamente y puede quedarse fuera, pero se puede recolocar manualmente.
- Grado III: la rótula está luxada la mayor parte del tiempo, aunque puede recolocarse, aunque tiende a salirse de nuevo.
- Grado IV: la rótula está permanentemente fuera de lugar y no puede recolocarse sin cirugía.
Tratamiento de la luxación de rodilla en perros
El tratamiento varía según el grado de luxación y será el profesional veterinario, después de concretar el diagnóstico, el que determinará los pasos a seguir:
- Grados I y II -leves o moderados-. En algunos casos, pueden tratarse con fisioterapia, control del peso, suplementos articulares y antiinflamatorios si hay dolor. En los casos leves, puede optarse por un enfoque conservador que incluya el uso de condroprotectores y sesiones de fisioterapia y rehabilitación para mejorar la estabilidad de la articulación.
- Grados III y IV -moderados a graves-. Generalmente, se recomienda cirugía por parte de especialistas para corregir la alineación de la rótula y estabilizar la articulación. En situaciones más complejas, el traumatólogo veterinario puede recomendar una intervención quirúrgica, ya sea para corregir tejidos blandos, realizar modificaciones óseas o ambas.
En algunos casos es posible mejorar la calidad de vida del perro sin recurrir a la cirugía de la rótula, especialmente si la luxación es leve -grado I o II- y no causa dolor intenso o cojera constante.
¿Es dolorosa la luxación de rodilla en perros?
Sí, la luxación de rodilla en perros puede ser dolorosa, especialmente cuando la rótula se desplaza fuera de su posición normal y causa inflamación o irritación en la articulación.
- En grados leves, el dolor puede ser intermitente y más notorio tras actividad física o movimientos bruscos.
- En luxaciones más graves o crónicas, el dolor suele ser constante, acompañándose de cojera, inflamación y dificultad para apoyar la pata.
Sin embargo, algunos perros pueden acostumbrarse a la luxación y mostrar poca molestia al principio, lo que no significa que no haya daño articular.
Por eso es importante consultar al veterinario ante cualquier signo de cojera o dolor para evaluar y tratar adecuadamente.
Tiempo de recuperación y seguimiento postoperatorio
Si se lleva a cabo la cirugía, es fundamental asegurar un buen postoperatorio, con reposo adecuado y seguimiento por parte de un veterinario especializado en rehabilitación.
El tiempo de recuperación tras una cirugía por luxación de rótula en perros varía según el grado de la luxación, la técnica quirúrgica empleada y la respuesta individual de la mascota, pero en general:
Tiempo de recuperación:
- Reposo inicial: 2 a 3 semanas de reposo estricto con paseos cortos y controlados con correa.
- Recuperación total: suele alcanzarse entre las 6 y 12 semanas postoperatorias.
- Actividad normal: puede retomarse gradualmente a partir de las 8 semanas, siempre bajo indicación veterinaria.
Seguimiento postoperatorio:
- Control del dolor: con antiinflamatorios y analgésicos recetados por el veterinario.
- Revisiones veterinarias: a los pocos días de la cirugía, y luego periódicamente -2, 4, 8 semanas- para controlar la evolución.
- Fisioterapia o rehabilitación: en muchos casos se recomienda para acelerar la recuperación y mejorar la función de la articulación.
- Evitar saltos y juegos bruscos: al menos durante las primeras 6-8 semanas.
- Alimentación adecuada: para evitar el sobrepeso, que puede afectar negativamente a la articulación.
Es importante recordar que estos datos son aproximados, puesto que los tiempos de recuperación y los resultados finales dependerán de las características de cada perro, según su historia clínica, edad, tamaño, entre otros factores.
El pronóstico tras la cirugía -en caso de ser necesaria- suele ser muy bueno, especialmente en casos tratados a tiempo y con buen manejo postoperatorio.
¿Qué consecuencias tiene para el perro? Pronóstico y calidad de vida
El pronóstico de un perro con luxación de rótula depende principalmente del grado de la luxación, la edad, el estado general de salud y si se opta por tratamiento quirúrgico o conservador.
En los casos crónicos, la fricción constante sobre el cartílago puede acabar provocando artrosis, con un dolor creciente y una cojera cada vez más evidente. Además, la alteración de la pisada y de la biomecánica de la rodilla somete a los ligamentos a una tensión excesiva, lo que puede llevar, en algunos casos, a su rotura.
¿Qué perros son más propensos a sufrir la lesión?
Es más frecuente en perros pequeños con patas de conformación arqueada, como el Yorkshire Terrier, el Maltés, el Chihuahua o el Boston Terrier. No obstante, esta condición también puede presentarse en canes de mayor tamaño.
Prevención y cuidados
Aunque no siempre se puede evitar la lesión, la prevención sí ayuda:
- Evitar el sobrepeso, y, en consecuencia, la sobrecarga las articulaciones. Es importante controlar el peso para aliviar algunos de los síntomas de la luxación rotuliana. Esto asegurará que no haya demasiado peso sobre la pierna afectada.
- Hacer ejercicio de forma moderada y regular, evitando el juego excesivo, mantendrá a la mascota en forma y fortalecerá sus músculos y articulaciones.
- Prestar atención a cualquier signo de cojera o molestia y consultar al veterinario si se presentara alguno de estos síntomas.
Dependiendo del grado de luxación diagnosticado, puede ser necesario adaptar la rutina de ejercicio de su perro, reduciendo las actividades más exigentes. No se trata de eliminar por completo el juego o el ejercicio, pero sí de optar por opciones más suaves, como caminar en lugar de saltar.
El profesional veterinario podrá orientar sobre el tipo de actividad física más adecuada para su mascota.
¿Por qué es importante evitar superficies resbaladizas?
Evitar superficies resbaladizas es una medida básica para proteger a los perros con luxación de rótula, tanto si están en tratamiento conservador como si se están recuperando de una cirugía:
- Debemos prevenir caídas y resbalones que pueden agravar la luxación o causar recaídas tras una cirugía.
- Reduciremos la tensión en las articulaciones, especialmente en las rodillas.
- Mejorará la estabilidad del perro, favoreciendo una marcha más segura y controlada.
Recomendaciones prácticas en casa:
Estos cuidados sencillos ayudan a prevenir lesiones y a mantener una mejor calidad de vida para perros con luxación de rótula:
- Coloque alfombras antideslizantes o esterillas en zonas donde el perro pase tiempo como salones y pasillos.
- Evite suelos como baldosas, parquet o mármol sin cubrir.
- Se recomienda el uso de calcetines antideslizantes o botas especiales, si el perro lo tolera.
- Seque bien las patas si vienen mojadas del exterior para evitar que patine.
La importancia del control del peso
Controlar el peso de nuestro perro, gato o animal de compañía no solo es una cuestión de estética, es un factor fundamental para preservar su salud y prevenir una amplia variedad de enfermedades.
El sobrepeso y la obesidad en los perros no solo reducen su calidad de vida y energía diaria, sino que también aumentan significativamente el riesgo de desarrollar problemas articulares como la luxación de rótula o la displasia de cadera, así como enfermedades metabólicas como la diabetes, problemas cardiovasculares y respiratorios, e incluso una menor esperanza de vida.
El exceso de peso también agrava condiciones preexistentes, ya que somete a las articulaciones y órganos internos a un esfuerzo adicional. Por ello, mantener una alimentación equilibrada, ajustada a las necesidades específicas del animal en función de su edad, tamaño, nivel de actividad y estado de salud, es esencial.
A esto se suma la importancia de un estilo de vida activo, con paseos regulares y juegos que fomenten el movimiento sin forzar al animal, como hemos mencionado en el apartado de “Prevención y cuidados” en este mismo artículo.
Un control veterinario periódico permite detectar a tiempo cualquier dolencia antes de que derive en problemas mayores en la salud de su mascota. La detección temprana y un diagnóstico adecuado de la luxación o rotura de rótula, son clave para evitar complicaciones a largo plazo, como la artrosis o la rotura de ligamentos. Con un tratamiento adaptado al grado de luxación y el apoyo de una buena rehabilitación, la mayoría de los perros pueden recuperar una buena calidad de vida.
Si detecta y reconoce alguno de los síntomas y sospecha que su perro puede sufrir una rotura o luxación de rótula, en SURvet ponemos a su disposición atención veterinaria 24 horas, gracias a un equipo que le atenderá todos los días del año en horario de urgencia. Puede contactar con nuestro centro a través del teléfono +34 934 594 500.
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