Si observamos que nuestro gato usa el arenero más veces de lo habitual y sus deposiciones son abundantes o de consistencia menos sólida, es muy posible que esté padeciendo diarrea.
La diarrea en gatos es un síntoma caracterizado por evacuaciones frecuentes, sueltas o líquidas y se produce debido a causas que pueden ser variadas y van desde cambios en la dieta, estrés, intolerancias alimenticias y parásitos intestinales, mal funcionamiento de órganos implicados en la digestión (hígado, páncreas), hasta infecciones bacterianas o virales. También puede ser un signo de problemas más serios como enfermedades inflamatorias intestinales, pancreatitis o incluso ciertos tipos de cáncer.
En casos leves, una dieta blanda o de prescripción de tipo gastrointestinal, pueden ayudar, pero si la diarrea persiste más de 24 horas, o antes si es muy abundante y el gato muestra signos de no encontrarse bien, y es importante mantener la calma y acudir al veterinario.
¿Qué es la diarrea? ¿Qué la provoca? ¿Es grave? ¿Cuánto dura? En este artículo, desde SURvet, explicamos, entre otras cosas, los distintos tipos de diarrea que existen, como dichos tipos de diarrea pueden afectar a tu gato, cuáles son los alimentos que pueden desencadenarla… y mucho más.
Contenidos
¿Qué es la diarrea felina? Síntomas
Definimos la diarrea en los gatos como el aumento de la frecuencia, volumen o contenido líquido de las heces, lo cual provoca que su aspecto cambie respecto a las deposiciones habituales, presentándose amorfas o sueltas. También afecta a la consistencia, ya que pueden ser heces blandas, pero con forma, o deposiciones líquidas.
Los síntomas más frecuentes que suelen manifestarse son:
- Consistencia de las heces no habitual: acuosas, líquidas o pastosas.
- Malestar y dolor al defecar.
- Debilidad, cansancio y fiebre.
- Presencia de sangre o mucosidad en las heces.
- Deshidratación intensa: acompañada de pulso débil, ritmo cardíaco acelerado y arritmia.
- Falta de apetito: pérdida de peso, náuseas y vómitos.
- Debilidad muscular por la pérdida de electrolitos.
Es vital tener en cuenta que, debido a la pérdida rápida de líquidos y electrolitos, la diarrea puede llevar a una deshidratación significativa. Esta pérdida de líquidos compromete el equilibrio de sales minerales esenciales para el funcionamiento del organismo, lo que afecta rápidamente a su bienestar general, especialmente si el gato es muy joven, es mayor o tiene un sistema inmunológico debilitado. Por eso, es crucial llevarlo al veterinario lo antes posible cuando aparecen estos episodios, ya que la deshidratación puede agravar los síntomas y poner en riesgo su vida si no se trata a tiempo. Además, como hemos explicado anteriormente, el veterinario podrá determinar la causa exacta de la diarrea, ayudando a elegir el tratamiento adecuado y a evitar posibles complicaciones.
¿Qué tipo de diarrea tiene mi gato? Tiempo duración
Dependiendo del intestino donde comienza la diarrea:
- Diarrea aguda: aparición repentina y duración breve.
- Diarrea crónica: duración superior a 3 días.
- Diarrea persistente o constante en el tiempo.
- Diarrea intermitente: se presenta de forma puntual de manera aleatoria.
Además, la gravedad de la diarrea felina también se evalúa por el tamaño y la cantidad de heces evacuadas durante un período de tiempo.
- Diarrea grave es cuando nuestro gato tiene más de 10 evacuaciones flojas y de consistencia acuosas en un solo día.
- Diarrea moderada es cuando defeca más de lo habitual, pero no más de 10 evacuaciones diarreicas en un día.
- Diarrea leve es cuando tiene pocas evacuaciones diarreicas en un día.
¿Cuáles son las causas de la diarrea en los gatos?
Las causas por los que un gato puede presentar diarrea son diversas:
- Cambio de la dieta sin periodo de transición o la ingestión puntual de un alimento no habitual.
- Alergia alimentaria o intolerancia a un ingrediente concreto de la dieta.
- Debido a enfermedades infecciosas como virus, parásitos o bacterias.
- Debido a una enfermedad inflamatoria intestinal, asociada a la diarrea crónica.
- Presencia de tumores en el intestino o en otros órganos.
- Por enfermedades que afectan a la glándula tiroides (hipertiroidismo, hipotiroidismo) el hígado o el páncreas, afectando en consecuencia al aparato digestivo.
- Por enfermedades subyacentes como síndrome del intestino irritable (IBS), enfermedad inflamatoria intestinal (IBD), virus de la inmunodeficiencia felina (FIV), peritonitis infecciosa felina (FIP), entre otras como puede ser también el cáncer o insuficiencia renal grave.
La diarrea en cachorros de gato
La diarrea en cachorros de gato es especialmente preocupante, ya que su organismo es más frágil y susceptible a la deshidratación rápida. Al ser tan jóvenes, su sistema inmunológico aún no está completamente desarrollado, lo que los hace más vulnerables a infecciones y parásitos, que suelen ser causas comunes de diarrea en esta etapa. Además, factores como el estrés por el cambio de ambiente o el destete, una dieta inadecuada o alergias alimentarias también pueden desencadenar problemas digestivos.
La diarrea prolongada o severa en cachorros puede llevar a desequilibrios electrolíticos graves, pérdida de peso y debilitamiento, lo cual puede tener consecuencias potencialmente fatales si no se actúa a tiempo. Por eso, es vital acudir al veterinario rápidamente para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. El especialista podrá recomendar una rehidratación y cuidados específicos, como ajustes en la dieta o medicamentos seguros para su edad, que ayudarán a que el cachorro se recupere y crezca fuerte y saludable.
Las causas más habituales de diarrea en los gatitos son:
- Cambio repentino en la dieta.
- Presencia de parásitos intestinales.
- Por infecciones bacterianas o víricas.
- Hipersensibilidad a la leche de vaca.
- Por comer en exceso.
- Por estrés producido por un cambio en su entorno.
Como hemos mencionado anteriormente, para tratar la diarrea en gatos, es importante identificar la causa subyacente y, en función a esta, pautar un tratamiento. No debe perderse la calma, ya que, con el tratamiento pautado por el profesional veterinario, la diarrea en los gatitos se puede tratar.
No solo los gatitos, también gatos adultos y seniors, pueden ingerir algún objeto extraño como juguetes, medicinas o cualquier cosa que encuentren en su entorno. Si son piezas sólidas, pueden quedar atravesadas en el esófago, en el estómago o en el intestino, provocando una grave obstrucción intestinal. Si lo que han ingerido son medicinas o cualquier otra sustancia similar, provocará diarreas, entre otros síntomas como vómitos, pérdida del apetito y letargo.
En cualquier caso, estas son situaciones que requieren atención veterinaria inmediata.
¿Qué alimentos provocan diarrea a los gatos?
Como hemos comentado anteriormente, cualquier cambio de dieta ha de realizarse paulatinamente, evitando cualquier cambio brusco de alimentación, ya que ello podría provocar trastornos digestivos como la diarrea.
Es muy importante no dar sobras de nuestros alimentos al gato, ya que, no solo no aportan los nutrientes suficientes para el felino, sino que existirá la posibilidad de que ingiera algún alimento como el chocolate, el ajo y la cebolla, el aguacate, o los huevos crudos que pueden producir intoxicación y/o ser perjudiciales para los gatos.
Cuidados y prevención de la diarrea en gatos
No se pueden prevenir todas las causas de la diarrea en gatos, pero sí minimizar el riesgo con las siguientes medidas profilácticas que podemos realizar en casa de manera cotidiana.
Para cuidar y prevenir la diarrea en gatos, es fundamental prestar atención a su dieta, entorno y salud general. Aquí algunos consejos clave para evitar este problema y mantener su sistema digestivo saludable:
- Reconocimiento de las heces para detectar presencia de lombrices.
- No cambiar el pienso con frecuencia y si lo hacemos que sea de manera gradual.
- Guardar los alimentos no aptos para gatos fuera de su alcance.
- No darles comida nuestra, hay alimentos que pueden resultar tóxicos o venenosos para los gatos.
- Es importante mantener el entorno limpio: comederos, juguetes, camas…
- Acceso a agua fresca y limpia en todo momento para prevenir la deshidratación.
Además, las revisiones periódicas ayudan a detectar problemas de salud tempranamente, y los análisis coprológicos para detectar posibles parasitosis, son fundamentales para evitar enfermedades que puedan derivar en diarrea, así como administradles las vacunas recomendadas y desparasitarlos regularmente.
Con una atención rápida del veterinario, evitaremos que nuestro gato sufra deshidratación y otras complicaciones derivadas de la diarrea, como desequilibrios electrolíticos, pérdida de peso o debilidad general. Como hemos mencionado, la diarrea puede ser especialmente peligrosa en gatitos, gatos mayores o en aquellos con un sistema inmunológico comprometido, por lo que acudir al veterinario lo antes posible es imprescindible para prevenir consecuencias graves.
Si su gato sufre episodios de diarrea moderada o grave, en SURvet ponemos a su disposición atención veterinaria 24 horas, gracias a un equipo que le atenderá todos los días del año en horarios de urgencia. Puede contactar con nuestro centro a través del teléfono +34 934 594 500.
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