Al igual que los humanos, nuestras mascotas también pueden sufrir alergias al polen.

Los días más cálidos de primavera y verano generan altos niveles de polen. Esto puede suponer irritación y sufrimiento para las mascotas con rinitis alérgica, también llamada “fiebre del heno”, que es el nombre con el que identificamos esos síntomas parecidos a los de un resfriado, que incluyen goteo de la nariz, picazón en los ojos, congestión, estornudos y presión en los senos paranasales.

En el siguiente artículo, el equipo de SURvet queremos hablarle de cómo se manifiesta la alergia en los perros sensibles a la presencia o exposición al polen y qué podemos hacer para minimizar sus síntomas.

¿Cómo puedo saber si mi mascota tiene alergia al polen?

Aunque las señales pueden ser un poco diferentes, la causa de las alergias es la misma en las mascotas que en los humanos. Se trata de una respuesta desmesurada del sistema inmunológico.

Estos son algunos de los síntomas más comunes que su mascota puede mostrar en caso de padecer alergia y a los que deberemos prestar atención:

  • Si su perro se hace pequeñas heridas lamiéndose o mordiéndose las patas u otras zonas del cuerpo.
  • Si su piel se enrojece e inflama, sobre todo alrededor de los ojos, las orejas y entre las patas o en la barriga.
  • Si sacude la cabeza reiteradamente.
  • Si, para rascarse, frota sus orejas o el hocico con el suelo u otras superficies con frecuencia.
  • Si observamos que está más cansado o aletargado de lo habitual.

Puede no ser fácil averiguar, con exactitud, qué está causando la alergia de su perro. Pero si algunos de los síntomas se agudizan más en primavera y verano que en invierno, el polen es el culpable más probable y, ante la presencia de alguno de estos síntomas, es conveniente ponernos en contacto con nuestro veterinario habitual para programar una cita lo antes posible. Tratar la alergia mejorará, sin lugar a dudas, la calidad de vida de su perro.

¿Cuál es el origen de las alergias de su mascota y cómo podemos tratarlas?

La mejor manera de gestionar las alergias de su perro, es tratar de evitar el contacto con el foco del polen. Lo ideal sería determinar qué tipo de plantas y qué tipo de polen están causando los problemas de alergia de su mascota. Si, por ejemplo, es alérgico al polen de determinados árboles, lo mejor es evitar los paseos por el parque o bosque cuando los árboles están en períodos de máxima producción de polen.

Trate de averiguar en qué momento del año su mascota se ve más afectada por la alergia al polen. Puede variar según el lugar donde viva. Esto le ayudará a tener una idea del tipo de polen que causa el problema y las áreas que quizás desee evitar. Será útil como guía saber que, en primavera, aumenta la producción del polen de árboles. A finales primavera y principios de verano, se produce más polen de gramíneas. Y en verano, aumenta la producción del polen de las malas hierbas en flor.

Además de las alergias al polen, existen otras alergias que pueden afectar a nuestro perro. También debemos tener en cuenta que, un mismo paciente, puede compatibilizar distintas alergias.

Tipos de alergias en perros

A continuación le mostramos cuidados y tratamientos recomendables para que su mascota evite las alergias:

  • Alergias alimentarias. Un perro puede tener sensibilidad o alergia a varios alimentos y, lo recomendable, será consultar con un especialista y llevar a cabo una prueba de eliminación de alimentos para averiguar qué, en su dieta, ocasiona problemas
  • Alergias parasitarias. Es muy importante mantener actualizada la rutina antiparasitaria. Los parásitos internos y externos, como las pulgas, garrapatas, ácaros y lombrices, pueden causar irritación, infección y alergias en la piel de nuestro perro.
  • Alergias a los productos de limpieza. Los perros también pueden mostrar sensibilidad o alergia a productos de limpieza que usamos en el hogar. Los síntomas (picazón y enrojecimiento de la piel, erupciones cutáneas y pústulas, irritación de los ojos y los oídos, estornudos y secreción nasal y problemas respiratorios) pueden variar en su gravedad y presentación según el perro y el tipo de alergeno al que están expuestos.

Como ya hemos recalcado en otras ocasiones, es VITAL no dar ningún medicamento a nuestra mascota por nuestra cuenta y sin que haya sido prescrito y pautado por un veterinario. Tampoco son recomendables los remedios caseros: además de ser ineficaces, pueden ser peligrosos en las dosis incorrectas o para ciertas especies.

¿Cómo podemos ayudar a un perro alérgico al polen?

Los paseos, el ejercicio físico y pasar tiempo con otras mascotas y personas son importantes para su perro, y ¡también para usted! Además, con la llegada del buen tiempo, apetece más salir.

Si su perro sufre de alergia al polen, existen una serie de consejos que puede tener en cuenta durante los meses más complicados:

  • Consultar el pronóstico de polen todos los días antes de los paseos. Podemos hacerlo a gracias a servicios online o apps, como por ejemplo Allergycast ®
  • Es mejor programar las caminatas antes del amanecer, al final de la tarde o temprano en la noche, ya que recuento de polen es más bajo.
  • Debemos evitar que los perros estén mucho tiempo en el césped, porque hasta un rápido revolcón en la hierba puede dejar su pelaje cubierto de polen, y eso se traducirá en horas o incluso días de problemas.
  • Debemos limpiar su pelo al regresar a casa, sobre todo las patas y el hocico y así eliminar cualquier rastro de polen. Son recomendables las toallitas para mascotas o un paño húmedo. Si su perro es muy sensible, puede enjuagarlo con agua o usar productos específicos como champú en seco.
  • Un buen cepillado diario ayudará a eliminar el polen adherido a su pelaje. Mantener el pelaje de los perros de pelo largo más corto, puede ayudar a reducir los problemas ocasionados por la sensibilidad al polen.
  • Un baño periódico puede ayudar a eliminar el polen persistente. El uso de champú hipoalergénico especial para mascotas es lo más recomendable, ya que aportará ingredientes antibacterianos que ayudarán a evitar infecciones de la piel si su mascota sufre algún rasguño.

En conclusión, es crucial reconocer y abordar las alergias al polen en perros y otras mascotas para garantizar su bienestar y calidad de vida. Aunque existen medidas que los propietarios pueden tomar para aliviar los síntomas, como minimizar la exposición al polen y utilizar productos antialérgicos, la visita a un especialista en dermatología veterinaria es fundamental. Un veterinario especializado podrá realizar pruebas específicas de alergia para identificar los desencadenantes exactos y desarrollar un plan de tratamiento personalizado. Además, podrá recetar medicamentos adecuados y proporcionar pautas para controlar las alergias de manera efectiva.

No subestime la importancia de buscar ayuda profesional cuando se trata de la salud y el bienestar de su perro. Al hacerlo, estará brindando un alivio duradero y mayor calidad de vida a su compañero de cuatro patas. Si muestra un síntoma o más como los descritos en este artículo, en SURvet contamos con un equipo de veterinarios que le atenderá rápidamente y llevará a cabo un diagnóstico. Puede contactar con nuestro centro a través del teléfono +34 934 594 500.

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